Cada paso del hombre es una prueba de fuego, un intento de burlar sus propias leyes y de sortear la vida, una existencia que parece movida por hilos tenues. God’s Machine de Yasmany González Hernández, es precisamente un acercamiento paródico a ese ser humano en pos de protesta contra el mundo circundante.
Este primer acercamiento a la obra del autor nobel salió a la luz en 2015, bajo el sello de Ediciones Loynaz y pertenece a la colección El Fausto. Los 52 cuentos cortos que agrupa el exiguo volumen rutilan ironía y sarcasmo. Ante la lupa del lector desfilarán costumbres, historia, literatura, magia, esoterismo, religión, arte y onirismos, todo con el «noble» fin de hacernos pensar, porque God’s Machine es un libro para pensar.
La plena comprensión de estas narraciones que desmantelan la creación humana y celestial, exigirá en gran medida de un lector avezado, capaz de imbricar sus conocimientos con lo enmarañado de estos textos donde la simbología estará presente en cada línea.
Verdaderamente lamentable es la edición del libro, plagada de erratas que saltarán a la vista, incluso, de los menos eruditos. Curioso resulta encontrar el nombre del autor escrito de tres maneras diferentes: Yasmani, Yasmany y Yasmnany, suceso que solo pudiese explicarse si nos dijeran que es parte del «juego» que es en sí todo el libro. A pesar de que las pifias cometidas por el editor pudieran parecer inocuas, estas demeritan su propia labor, la de la editorial y la del joven escritor.
La omnisciencia del narrador lo sitúa fuera y por encima de unos personajes de corta y maleable existencia. El tono empleado por el escritor denota frialdad, quizás con el objetivo de lograr ese toque irónico que define su debut. De cualquier forma, es esta quizás la semilla de un autor del que esperamos más en un futuro inmediato.
Yasmany González Hernández, es miembro de la Asociación Hermanos Saíz y jefe de la sección de Literatura.
Tomado: Guerrillero digital